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¿Acaso la vida laboral termina después de los cincuenta años?

La pandemia y sus estragos en el ámbito laboral

Según datos de la Organización Internacional del Trabajo, se esperaba que la reducción en puestos de trabajo pasaría de 5.3 millones hasta 24.7 millones a consecuencia de la pandemia, en donde los países de ingresos medios y altos serían los más afectados; estos datos estadísticos fueron proyectados hace un año, en marzo 2020.

Hoy, prácticamente a un año de que inició la pandemia “oficialmente” en México, nos percatamos que el COVID-19 ha afectado en distintas formas y niveles; por mencionar algunas de las más afectadas, tenemos a la industria restaurantera, de entretenimiento, manufactura, construcción y por supuesto, al turismo y sus variantes (MICE, Leisure y de Negocios).

En materia económica, el Banco Mundial reportó que el COVID-19 continúa teniendo un impacto negativo en distintos sectores como el turismo, comercio entre otros. Como respuesta a esto, las empresas han tomado medidas drásticas para tratar de mitigar un poco el impacto, como resultado se dio de baja a un gran número de personal sin importar el nivel jerárquico que tuvieran en la empresa.

El porcentaje de personas desempleadas va en aumento y lamentablemente somos muchos los que tenemos más de 50 años y nos hemos topado con una triste realidad después de tantos años de trabajo ininterrumpido, la edad se convierte en una gran barrera.

Al término de nuestras carreras universitarias, entusiasmados por comernos al mundo salimos a emprender la búsqueda para colocarnos en una compañía de renombre, en la mayoría de las entrevistas nos enfrentábamos a un común denominador, nos faltaba experiencia y nos sobraba juventud, lo que nos orillaba a aceptar el trabajo y comenzar, como se dice coloquialmente, “desde abajo”. Al día de hoy nos damos cuenta que era la mejor opción que teníamos ya que gracias a eso, hoy podemos valorar toda la experiencia adquirida a lo largo de los años.

Gracias a eso, hoy, somos personas que a través de esa experiencia hemos tenido logros significativos en esas grandes compañías en las que nos hemos desarrollado. Hemos logrado junto con ellas alcanzar las metas establecidas trabajando en equipo, con compromiso y lealtad. Siguiendo y adoptando misiones y visiones propias y de la compañía.

Y es así como hemos llegado a construir nuestra experiencia, enriqueciendo nuestros conocimientos que al día de hoy nos hacen personas con un alto  grado de capacidad para solucionar, proveer, sugerir y brindar las mejores prácticas y formas de trabajo que lleven a las empresas al cumplimiento satisfactorio y en muchas ocasiones, a exceder sus objetivos.

Es un hecho que todo evoluciona, el tiempo no se detiene y las formas de trabajo han cambiado, incluso hasta la forma de buscar empleo, desde la manera de hacer un CV, hasta la forma de entrevistar a un candidato e incluso los criterios de selección.

“Anteriormente nos pedían experiencia, pero justo acabábamos de graduarnos, ahora que tenemos la experiencia, lo que nos falta es la juventud; ¡Juventud, divino tesoro!, cuánta razón tiene esta frase tan trillada por nuestros padres y abuelos”

¿Acaso la vida laboral termina después de los cincuenta años?

En la actualidad, la esperanza de vida promedio en México es de 75 años, de acuerdo con información del Consejo Nacional de Población (Conapo).

En nuestra nueva realidad, en la búsqueda de empleo, nos postulamos a alguna vacante no por nuestra juventud, sino por que ofrecemos: compromiso, experiencia y conocimientos adquiridos a través de los años.

 “La percepción colectiva de que el envejecimiento ya no es lo que era antes, nos hace pensar que es posible alargar la edad madura sin el declive de antaño. No está claro que nuestra sociedad envejezca más despacio, pero sí parece que nuestros hábitos de vida pueden ralentizar o acelerar el proceso”


Eduardo Villa Hernández, Lic. en Turismo egresado de la Escuela Superior de Turismo del Instituto Politécnico Nacional. Con una considerable trayectoria en el ramo de la industria en viajes Leisure, y mayormente viajes corporativos o de negocios. Su paso por grandes corporativos tales como: 

American Express Co. (México), Televisa Corporación y recientemente Elementia Servicios Administrativos SA de CV, donde se desempeñó como Travel Manager teniendo a su cargo la administración de viajes de 8 países de la región que contempla este holding del ramo de la construcción (México, América Central y Región Andina), hacen de Eduardo una persona con conocimientos y experiencias considerables en la industria de viajes de negocios y turismo de reuniones y convenciones.

  

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