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Los servicios aeroportuarios incluyen: aterrizaje, plataforma, pernocta de aeronaves y salas de abordaje. El rubro correspondiente al aterrizaje, despegue y navegación constituye el segundo gasto más pesado en la estructura de costos operativos para las aerolíneas mexicanas, sólo después del combustible.
La TUA en el aeropuerto capitalino ya es una de las más caras del mundo (nacional 503.22 pesos e internacional 955.49 pesos, promedio en 2023).
En 2022, y durante los primeros 3 trimestres de 2023, años de gran crecimiento para el transporte aéreo mexicano, estos gastos de navegación, aterrizaje y despegue constituyeron 14% de los gastos operativos.
Por lo que, con el aumento propuesto, representarán 17%, asumiendo que los demás costos operativos permanezcan estables y no experimenten variaciones significativas.
Este aumento va en contravía de las recomendaciones elaboradas por las autoridades globales a través de la Organización Internacional de Aviación Civil (OACI), la cual y de acuerdo con el Documento 9082, del cual México es Estado signatario, se alienta a los Estados a seguir 4 principios básicos en la fijación de tarifas. Estos son: No discriminación, relación con costos operativos, transparencia y consulta con usuarios.
La Cámara Nacional De Aerotransportes (CANAERO) reconoce la eficiencia de la administración del AICM, pero señala recursos limitados debido al desvío de ingresos. Se hace un llamado urgente a las instancias hacendarias para permitir que los ingresos se utilicen para el beneficio del aeropuerto y del país.
La International Air Transport Association (IATA) hace un llamado a reconsiderar el aumento y muestra su preocupación por el deterioro de las instalaciones y el nivel de servicio del AICM, que no reflejan el alto costo pagado por líneas aéreas y pasajeros. Además, se destaca la necesidad de revisar urgentemente el destino de los ingresos para asegurar mejoras que satisfagan la creciente demanda de pasajeros, sin incrementar tarifas adicionales a aerolíneas y usuarios, y recordó que la capacidad del aeropuerto se redujo recientemente a 43 vuelos por hora para facilitar las obras de mejora que se llevarían a cabo por las autoridades, pero desafortunadamente, los trabajos no han sido realizados hasta ahora.
“La rentabilidad del AICM se garantizaría si sus ingresos se destinaran para el mantenimiento, mejora e incremento de su infraestructura y no para otras cuestiones como el pago de bonos”.
Tanto aerolíneas internacionales como nacionales expresaron su inconformidad y advirtieron que el aumento en los costos se trasladara a los precios finales de boletos de avión.
En tanto la Asociación Latinoamericana y del Caribe de Transporte Aéreo (ALTA), aseguró que el aumento en las tarifas convertirá al aeropuerto en uno de los aeropuertos más caros de la región, y rechazó este inminente aumento impositivo a los servicios aeroportuarios de aterrizaje, plataforma, pernocta, así como a la revisión a pasajeros y su equipaje de mano (ERPE) en el AICM. Dijo que con la presente medida no está claro cómo el incremento de 77% está relacionado con costos de la operación pues, al momento, no se ha comunicado cómo se hizo el cálculo de las cifras ni la contabilidad y tampoco se ha tomado en cuenta el punto de vista de los usuarios y las consecuencias que este incremento tendrá. Este organismo representa a 160 compañías del ecosistema del transporte aéreo, incluyendo 40 aerolíneas responsables de más de 80% del tráfico aéreo en la región.
En 2022, el AICM generó casi 18,500 millones de pesos, y, de ellos, más de 73% fue por los cargos de TUA a los pasajeros y los servicios aeroportuarios a las aerolíneas.
El AICM precisó que estos precios no incluyen el Impuesto al Valor Agregado (IVA), el cual será trasladado en los términos de la Ley de la materia.
En resumen, el aumento propuesto en el AICM contradice los esfuerzos por reducir tarifas aéreas en México, generando preocupaciones sobre la asignación de ingresos y su impacto en la competitividad y la calidad de servicios aeroportuarios.
Se ratifica la disposición de la industria para colaborar con el gobierno y aportar las mejores prácticas internacionales, buscando mejorar la experiencia de los usuarios del transporte aéreo sin aumentar injustificadamente los costos.
